viernes, 20 de enero de 2012

“IL GATTOPARDO



El silente gato azul se encarama de un salto sobre los roídos restos del queso estatal. Extiende la mirada al frente y escruta con gesto grave a la muchedumbre de ratones que lo espía hambrienta. La avidez de sus ojos le irrita, el rictus de ira en sus bocas le sobrecoge. Buscando exorcizar el mal presagio, mira a derecha e izquierda y lo que ve le reconforta, a ambos lados se alinean las diecisiete legiones de gatos “taificos”, también los ceutís y melillenses, y un paso adelante los nobles “senator” junto a los del parlamento patrio y europeo, y cerrando formación la gatuna realeza. Qué temer, todos esos lustrosos gatos están allí para velar por el queso, para acrecentarlo en medida y en medida distribuirlo siguiendo criterios de equidad y eficacia.
El gato azul mirando a la multitud de ratones eleva la voz y sentencia: “La situación del queso es insostenible. El uso y abuso que de él habéis hecho lo ha mermado. Debemos efectuar dolorosos recortes y realizar cuantiosas aportaciones a fin de hacerlo sostenible.”
Los ratones se estremecen, qué aportar que no haya sido ya dado, dónde ser recortados. La desolación se hace infinita en su finita culpa.
De pronto, uno de ellos, sin ideología, ni afiliación, grita la evidencia: “Han sido los gatos, Mariano. Ellos lo han devorado, y así lo harán con todo aquel que en un futuro podamos cuajar.”
Nada nuevo le ha sido revelado, lo sabe, pero qué puede hacer, él también es un gato.

7 comentarios:

  1. Ya no sé si tendremos fuerzas para cuajar; regurgitaremos. Y aún así, allí estarán de nuevo los gatos para llevárselo (calentito, como el chiste aquel, irreproducible por vomitivo.) Ya sé que es simple la pregunta, pero habrá que hacerla: ¿quién le va dar en los morros al gato? Me temo que no habrá arrestos. Tendremos que "muxir" a vaca, hervir la leche y hacer la cuajada mientras los gatos se relamen de gusto a la espera.

    Si es que lo cuentas tan claramente, se ve tan claramente que es queso, que no sé como le llaman fromage...!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ave César!!

      Esa pregunta te la responden en Marinaleda, pero rapidito!!. Es lo que tiene la gente que no ha confundido los términos socialismo y "socialdemocracia"!!

      Eliminar
    2. ¡¡Perdón...se me olvidó el enlace...que explica cómo no repartir con los gatos tu queso!!

      Eliminar
  2. Desde luego, no cabe duda, los gatos han sabido condicionar el pensamiento del ratón haciéndole creer que para él, la amenaza está en el resto de sus congéneres.

    ResponderEliminar
  3. Estimado César, nos la dieron con queso, nos la dan y nos la seguirán dando porque de sus manos de uñas retractiles ha de nacer la felina solución que ponga fin al imperio del gato.
    Nuestra inocencia de todos modos no va más allá de la de amontonar sin cuidado gatos y más gatos para que pongan freno a ese abuso que nace hoy de mi mano, mañana de la del otro y así sucesivamente, sin querer entender que el mejor guardián y el mejor gobierno está en uno mismo.
    Gracias por tu visita y tus sabias palabras amigo.
    Recibe un fraternal abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Sí, Marinaleda es un buen ejemplo, pero nos ha parecido más correcto observarlo como la simple y simpática ocurrencia de un trasnochado. Un desvarío social muy apropiado para ilustrar un programa televisivo en horas de poca audiencia.
    En nuestra selva el gato no es sino la expresión del miedo que el ratón siento por el ratón, lo que lleva a investir a cientos de ellos en esa condición a fin de que les defienda de todas sus ruindades y más aún de las que vislumbran en los demás.
    Recibe un fraternal abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Has escrito un bonito y simpático relato como ejemplo del gato, y es que las uñas pueden llegar a estar muy afiladas, tan solo tenemos que estar al acecho.

    Mil gracias por devolverme la visita y por dejarme un bonito comentario, si no te importa, volveré por tu blog, mientras me quedo viendo otras entradas, para conocer más del arte de tus letras.

    Un beso.

    ResponderEliminar