La Iglesia se adentra de la mano del Papa en la senda de la desproletarización de Jesús, en beneficio de una concepción, permítaseme el termino, más “pija”. El primer paso es escamotear del establo donde nació, la mula, el buey y los pastores, en atención, supongo, a su falta de salubridad y decoro. Manteniendo, eso sí, intacta la condición de virgen de la madre y putativo del padre. Embarcado el rentista del dogma en tal cerrazón intelectual, debió cuestionar esto último, porque es menos creíble que el hecho de que un humilde carpintero y su mujer hubiesen sido padres naturales de un dios que buscaba ser hombre y como tal engendrado y parido.
Pero claro, la cuestión no era entrar en tal disquisición científica sino en la inquisición teológica e ir suprimiendo de la biografía del Mesías aquellos aspectos de su nacimiento que junto con sus palabras y actos le han llevado a ser tildado de comunista.
Intuyo que la curia busca reconvertir al visionario “pupas” en un instruido triunfador. Porque lo que ahora seduce es el hombre de éxito, ese que camina con su supernova de la fortuna estampada en la frente y hace caja en el “Belén” de la ocasión económica. Olvidando que fue la empatía del paria y no la antipatía de Yavé la que le dio acceso a los movimientos progresistas que han iluminado a la humanidad.
Jesús dio de la mano de Pablo un impulso universal al cristianismo, Benedicto XVI va camino de privatizarlo.
Dice ese cura descastado que ejerce en algunas parroquias de El Ferrol, con ironía de seglar, que hizo muy bien el papa eliminando del pesebre a banqueros (bueyes) y políticos( mulas).
ResponderEliminarTu lo dices con más belleza, pero al mensaje de Jesús no lo reconoce ni la madre misma que lo parió. Incluso entre los acólitos del Nazareno, hay claras y notables divergencias. Seguramente el Papa estará pensando en la poca utilidad de una humilde mula en la magna historia del cristianismo. Porque tal vez ignore la aventura de las fatigas del paisano y la inmensa utilidad de la acémila. A buen seguro piensa que Pedro, piedra, viajaba en papamóvil.
El padre espiritual de los que creen que creer es lo más importante -sin dejar de lado la cosa financiera, claro- es un individuo peculiar como corresponde al personaje.
ResponderEliminarDesconozco cual pudiera ser el motivo para eliminar las fuentes de calor en un pesebre tan inhóspito como este que nos ronda, pero me resulta curiosa la coincidencia que se produce al expulsar a los animales del belén mientras la policía, aquí, hace lo propio con los desahuciados de sus viviendas. Se me antoja que detrás de ambas iniciativas pudiera estar, tal y como nos sucede a nosotros, la banca, allí la vaticana. Podría ser igualmente esa imposibilidad de hacer frente a los gastos lo que haya llevado al desalojo de tan nobles animales, que comen más de lo que producen. Me temo que en estas fechas que se avecinan muchos ya no podrán envidiar el divino acomodo de la mula o el buey junto al depositario de sus últimas esperanzas. Ni el de su sumo sacerdote.
El subconsciente tiene mucho trabajo, puede que sea porque algunos siguen hablando en latín.
Saludos prenavideños.
El Papa quiere repicar e ir a misa, que se dice, no se puede ser padre del dogma y del pensamiento, a no ser que sea dogmático, con lo cual deja de serlo para ser otra cosa empecinamiento.
ResponderEliminarEs un placer tenerte por aquí amigo.
Recibe un fraternal abrazo.
FJavier el desahucio se ha producido al frío de los otros, todos en el fondo somos esa mula y ese buey, también esos pastores, todos estamos a día de hoy desahuciados de un razón que se llama justicia.
ResponderEliminarRecibe un fraternal abrazo.
D. José Alfonso!!
ResponderEliminarQué otra cosa se podía esperar de una religión que reinventó no hace mucho los famosos 7 pecados capitales... para adaptarlos a unos tiempos en los que la avaricia y la soberbia son virtudes de las que dan prestigio, fama... y buenos fondos para las arcas vaticanas y las de sus más fervientes acólitos.
Debe de ser muy molesto para la chusma católica que los confronten con el mensaje hileliano que originó el hace milenios extinto cristianismo. Volverán aquellas imágenes de los maestros italianos del renacimiento en las que la pobreza y la austeridad del personaje central de la mitología cristiana fueron sustituidas por el lujo de la burguesía que pagaba los lienzos.
Y es que para estos paganos no hay mayor herejía que la pobreza ni más peligrosa blasfemia que la Conciencia.
Saludos!!
Magnífica reflexión, especialmente esa última frase que los ultima con precisión y elegancia.
ResponderEliminarEs un placer.
Recibe un fraternal abrazo.