domingo, 6 de junio de 2010

ABSOLUTO Y ABSOLUTOS



El grito de repulsa contra Israel es unánime, no cabe otra respuesta, la acción de su ejército es merecedora de algo más que un severo reproche, se debe abrir una investigación y depurar penalmente las responsabilidades que sin duda alguna exigen el asesinato de diez personas.
Dicho esto afirmo que israelitas y palestinos se hallan, por exigencias estratégicas ajenas a su voluntad, abocados a vivir en un órdago de exterminio que los convierte en fieras acorraladas y como fieras se comportan. Llegados a este punto la respuesta internacional se divide en absolutos. Por un lado los países árabes, que han encontrado en el pueblo palestino la coartada perfecta para justificar su guerra santa y la santidad de sus jerarcas, aprovechan la agresión para criminalizar al pueblo judío. Por el otro la sociedad occidental habla de brutalidad intolerable, de crimen contra la humanidad, mientras que, con la otra mano, sus gobiernos, con el de Estados Unidos a la cabeza, apoyan a Israel como bastión de sus valores e intereses.
Entiendo, por tanto, que palestinos e israelitas no son sino víctimas en el papel de verdugos, sometidos al más brutal de los dilemas, el de luchar o sucumbir.
Juzgarlos bajo el prisma de sus actos se antoja sencillo, se impone indagar en la cruel realidad a que les empuja ese terrible absoluto que, en el plegar y desplegar de sus criminales estrategias geopolíticas, les ha reservado la comunidad internacional.

6 comentarios:

  1. He oido voces tachando de criminales a los Israelíes, otras tachando de terroristas a los Palestinos, en cada momento seguramente ambas tienen razón; pero nunca había leido un análisis tan fríamente certero de la situación. Son víctimas de sí mismos y de la Tierra Prometida que se ubicaba en lugar comprometido. A todas las partes les interesa que todo siga así menos a Israelíes y Palestinos. Los unos (musulmanes) encuentran justificación a su odio santo, los otros encuentran un muro y una inteligencia militar que tamice cualquier movimiento beligerante y lo asuma; que haga el trabajo sucio. Interesando a tantos esa situación no cabe más que esperar la liquidación física de uno de los bandos. En eso estamos. Todo lo demás son folclores colaterales. Como usted tan certeramente opina, víctimas en su papel de verdugos. Un éxodo sin viajes.

    Un placer leer.

    ResponderEliminar
  2. Gracias César por sus cariñosas palabras y aún más por esa hermosa y profunda reflexión con la que la complementa al tachar el desmán como “éxodo sin viajes”. Efectivamente amigo, eso es, un viajar continuo dentro de ese horrible vórtice de quietud que los abisma en la máxima expresión de la violencia, la que reclama el exterminio del adversario.
    Un placer amigo tenerlo por aquí y como le he dicho poder así disfrutar de su lucidez.
    Reciba un fraternal abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Creo que has dado en el centro de la diana, los únicos que son auténticas víctimas actuando de verdugos-marionetas de los otros, con grandes intereses, son palestinos e israelíes.
    Las guerras se manipulan dándole un objetivo nacionalista y religioso cuando ese no es más que un cebo para mover masas, el verdadero interés es otro y durante años ambas partes se están desangrando.
    Es patético ver esa lucha desde que éramos pequeños..es horrible ver que no se prevee ninguna solución en nuestros tiempos donde tecnología, comunicación y conocimientos nos harían capaces de solucionar cualquier problema.
    Un interesante blog el tuyo, con un interés especial en mirar con lupa la verdadera historia de las cosas que acontecen
    Besos!!

    ResponderEliminar
  4. Efectivamente la reflexión de occidente debería ir por ahí, por preguntarnos por qué no somos capaces de mediar con éxito en este conflicto. Pero para que engañarnos, las sociedades occidentales no son sino un ejército de actores representando el drama que se les escribe a fin de conjurar la culpa, véase video de estudiantes ayer mismo aporreando un vehículo de la policía en el que viajan de funcionarios judíos.
    Reciba un fraternal abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Sabes José Alfonso, me gustas cuando escribes de la infancia, el comentario que le dejaste a César es muy interesante, esa mirada desde la adolescencia a todo lo que se abría ante nosotrs lo has hecho en mi opinión de una forma muy precisa, con una descripción que casi nos levantas el velo que ponen los años. ¿Por qué no escribes más sobre las cosas que nos rozan el alma, además de lo que estás analizando: política y hechos sociales?.
    Abre esa puerta vieja que tanto te gustó y adéntrate en esa oscuridad del ser humano para curiosear y explicárnosla.
    Besos y perdona que te tutee, no me sale de otro modo.

    ResponderEliminar
  6. Muchas gracias Antoniatenea por el cariño que muestran tus palabras, lo cierto es que el relato de César es magnífico, un trabajo que sin duda invita a levantar velos y despertar a ese mundo perdido donde habitaban en nosotros los sentidos y los sentimientos en estado casi salvaje Tiempos, digo, en los que a menudo el latir atropellado del corazón, el tragar saliva, el apartar la mirada, el ponernos rojos o el tocarnos la nariz, eran gestos que eran capaces de transmitir más que todas las palabras con las que hoy tratamos de remendar los desafectos.
    Respecto a la temática monocorde del blog, te diré que contaba y cuento con uno, se llama “GRÂNDOLA LITERARIA”, en él es donde he ido publicando algunos trabajos de contenido, al menos pretendidamente, literario, mi pasión, poesía y relatos. Este de la Leva del Idiota, nació para volcar en él opiniones de carácter político y social. A menudo he tenido la tentación de publicar en él alguna entrada más en la línea que tu indicas pero al final siempre me ha frenado el deseo de no mezclar.
    Respecto a tú y el Ud. te diré que yo soy partidario del tú, me resulta más próximo, ocurre que empecé a utilizarlos en el blog de G.Francés y se extendió luego al de César, pero creo que es hora de que nos tuteemos, ya que nos empeñamos en vivir sin puertas entremos y salgamos de nosotros sin otro cuidado que el de no herir tan excelso acto de fraternidad.
    Colecciono como tú fotos de puertas viejas, me fascinan como ya te dije.
    Mil gracias amiga por el consuelo de sus palabras.
    Recibe un fraternal abrazo.

    ResponderEliminar